
¡Mi corazón te clama en el desierto! Te pregona, sol fulgente que iluminas mi interior, fuego solsticial que abrasas mi alma, refrescante lluvia veraniega que purificas mi mente. Tu recuerdo desciende hoy sobre el cenit de mi memoria; pero quizá mañana, se sepulte en el ocaso de mi olvido.
Morpheus Amorfo