Desde antes del principio

Te adoré, me incliné ante ti, me mostraste tu luz y me brindaste tu calor; sin embargo, te marchaste dejándome en la helada penumbra de tu ausencia.

Me substituiste por aquello incapaz de amarte; me arrojaste de tu presencia obligándome a formar parte de esa densa naturaleza.

Es aquí, en este noveno círculo de la desolación y la desesperanza en donde la pérdida de sentido y propósito de la existencia da vuelta al universo y se comprende que quizá para subir, haya que seguir bajando.

Morpheus Amorfo

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

A %d blogueros les gusta esto: